Esta reflexión viene dada por algunas cosillas que han pasado últimamente. No hace mucho saltaba a los medios de comunicación que un señor se liaba a navajazos con algunas personas que solo pasaban por ahí en un barrio de Bilbao. Después ha habido algunos artículos hablando sobre la enfermedad mental de este señor, que al parecer está diagnosticado con una psicosis delirante. O paranoide, que he leído ambas cosas. Como ésta, hay muchas noticias (a bote pronto recuerdo otro señor que mató a una mujer embarada en una iglesia y también le diagnosticaron una enfermedad mental, etc).
Bien, esta gente está diagnosticada con una enfermedad mental y como tal, la ley tiene otras consideraciones a este respecto. (Reducción de pena por atenuante, penas a cumplir en psiquiátricos en vez de en la cárcel, etc). Creo que es importante señalar que decir ley no es lo mismo que decir sociedad. Valga otra vez el primer ejemplo que he puesto. A este señor se le ha juzgado socialmente, ya que fue un hecho que oprimió bastante nuestros corazoncitos; pero no solo por el acto en sí, si no también por otras consideraciones de índole exclusivamente social que no vienen al caso. Esa presión social tuvo su manifestación consiguiente en la decisión del juez de internarlo en prisión a pesar de los claros indicios de una enfermedad mental (el diagnóstico definitivo ha venido después). Vamos, que al poquito de internarlo en prisión por orden judicial lo sacaron para remeterlo en un psiquiátrico.
Bueno, así que una vez expuesto el caso, allá van mis reflexiones. ¿Una persona que asesina es un enfermo? ¿La razón por la que mata es porque está enfermo? ¿Es suficiente justificación? No sé, de alguna forma, ¿una persona que le da por cargarse a otras no implica ya alguna anomalía? Porque al fin y al cabo, una enfermedad es una anomalía. También supone, quizá una demonización de todo aquel que tenga una enfermedad mental (y alguna de ellas es bastante común). ¿Todo el que está enfermo puede convertirse en un asesino?
En realidad, nunca he sido capaz de responder a estas preguntas de forma categórica.
Excelente tema, Srta Eguiarte.
ResponderEliminar*Von Kulebren se recuesta en su sofá de cuero con su batín y agita su copa mientras ajusta su monóculo*
Es exactamente lo mismo que pienso yo.
Aunque, hay que estudiar más temas, alguien que asesina por que un defecto genético le ha provocado una anomalia (esquizofrenia) aunque tiene potestad para no hacerle caso (moral) tiene sin embargo menos agravante moral que alguien que tras pensarselo mucho, decide matar a alguien por dinero, que alguien que acaba matando a su marido por ejemplo por que le daba palizas y la amenazaba de muerte.
Son considerables todas y cada una de las razones, peeero, un asesino, digamos alguien que sabe que ha hecho mal, pero le daba igual (como un asesino por robo) no necesita atención psiquiatrica (si necesita claro, pero menos que aquel que necesita fármacos para distinguir el bien y el mal).
Espero que me invite a esa copa de brandy, caballero...
ResponderEliminarEn todo caso, sí, me parece un tema interesante. Y evidentemente todo esto lleva a replantearse el tema de las justificaciones. ¿Y si se trata, por ejemplo, de una mujer que se ha cargado a su maltratador? Porque sería defensa propia de alguna manera. ¿O no lo sería? ¿Está enferma?
Como siempre, y por desgracia, ni todo es blanco ni todo es negro.